El glaucoma es una patología de la visión muy frecuente y está considerada la primera causa de ceguera en todo el mundo. En IOTT llevamos a cabo una campaña de concienciación por los municipios españoles gracias a nuestra unidad móvil para ofrecer revisiones gratuitas y frenar el ascenso de una enfermedad que, cada vez más, nos priva de tener una correcta salud visual. La importancia de estas revisiones se hace latente en esta enfermedad que, en los estadios iniciales, apenas muestra signos.
Al no ser una enfermedad que pueda curarse por completo, para el glaucoma es fundamental un diagnóstico precoz y un tratamiento lo más rápido posible. Ya que si se han producido daños en el nervio óptico antes de que la enfermedad es detectada por un oftalmólogo, éstos son irreversibles.
Detectar el glaucoma a tiempo
Aunque aún no hay una cura definitiva para este tipo de enfermedad, por suerte, la tecnología avanza y cada vez los métodos de detección son mejores. Actualmente el glaucoma se puede detectar a través de un examen completo de los ojos que incluye:
- Prueba de agudeza visual. Es una prueba con una tabla optométrica para medir la vista a diferentes distancias.
- Prueba del campo visual. Es una prueba para medir la visión lateral (periférica). La pérdida de visión periférica es una señal de glaucoma.
- Examen con dilatación de las pupilas. El oftalmólogo mira a través de un lente de aumento especial para examinar la retina y el nervio óptico para ver si hay señales de daño u otros problemas de los ojos. Después del examen, su visión de cerca podrá permanecer borrosa por varias horas.
- Tonometría. Es una prueba para para medir la presión del ojo.
- Paquimetría. Es un test con un instrumento de ondas ultrasónicas que mide la densidad de la córnea.
Equipo IOTT
