A lo largo de la vida, seguro que habéis pasado muchas veces por la consulta de un oftalmólogo o de una clínica para revisaros la vista. Desde pequeños, estamos acostumbrados a la típica prueba de leer números o letras en una pared mientras nuestro médico nos va cambiando las lentes para ajustarse a nuestra visión.
Es uno de los exámenes subjetivos que se llevan a cabo a la hora de evaluar el número de dioptrías positivas y negativas de un paciente y que determinan la graduación de las gafas o lentillas que habitualmente necesitamos. Pero, ¿qué es una dioptría exactamente?
¿Qué es una dioptría?
Dioptría es como se conoce a la unidad (en valores positivos o negativos) que evalúa el poder de refracción de la lente y equivale al valor recíproco de su longitud focal expresada en metros. La escala va de 0,25 en 0,25 y veréis que vuestra graduación puede ser negativa (lentes divergentes: miopía) o positiva (lentes convergentes: hipermetropía o presbicia).
¿Tienes dudas o preguntas sobre las operaciones de miopía? Te las resolvemos
Cuando no necesitamos ninguna lente para enfocar y ver correctamente los objetos a todas las distancias, se dice que tenemos «0 dioptrías», lo que se conoce como emetropía. Aunque, en realidad, el ojo humano en su estado natural presenta entre 60 y 65 dioptrías de poder refractivo.
Este sería, teóricamente, el ojo perfecto que se consigue tras someterse a una operación de cirugía refractiva o el que normalmente tenemos al nacer. La imagen que este ojo ve pasa perfectamente a través de la córnea, la pupila y el cristalino, enfocando en la mácula de la retina.
¿Cuál es la diferencia entre una persona miope y una persona hipermétrope?
Un ojo miope percibe una imagen desenfocada antes de llegar a la retina. Cuanto mayor sea la distancia desde el punto de enfoque a la retina, mayor será la cantidad de dioptrías que la lente necesitará para corregir la imagen y enfocarla correctamente.
La hipermetropía, por el contrario, desenfoca los objetos cercanos, ya que la imagen se forma por detrás de la retina. Y en este caso la corrección que necesita es la inversa.
En ambos casos, la cirugía refractiva puede corregir cualquiera de estos dos defectos visuales y devolver el ojo a una condición de refracción óptima, donde no necesite el uso de gafas o lentillas graduadas para conseguir que la imagen se proyecte de forma correcta en la retina.
Diferencia entre las dioptrías positivas y negativas
Una vez se entiende qué es una dioptría óptica y cuál es la diferencia entre miopía e hipermetropía, es posible profundizar en esta cuestión aprendiendo a diferenciar entre dioptrías positivas y negativas. Ambas causan problemas de visión y, en principio, no podemos distinguirlas entre sí por nosotros mismos cuando las sufrimos. Pero entonces, ¿en qué punto reside la diversidad entre ellas?
Precisamente está relacionada de manera directa con la cuestión anterior. Para comprender mejor estos problemas y cómo se miden y diagnostican, es importante asociarlos en cada caso con la positividad o negatividad de las dioptrías.
De este modo, al diagnosticar a una persona que presente hipermetropía hablaríamos de dioptrías positivas, lo que significa que, suponiendo que tenga una sola dioptría, verá correctamente todo lo que se sitúa a más de un metro de distancia, y así sucesivamente.
En el caso de las dioptrías negativas hablaríamos, cómo no, de la miopía. Al contrario que en la hipermetropía, las personas miopes pueden ver mejor lo que está cerca. Así, una dioptría implicaría que perciben de manera borrosa cualquier objeto situado a más de un metro de distancia.
Entonces, ¿qué es una dioptría óptica en el caso del astigmatismo?
Cuando hablamos de astigmatismo sigue habiendo diferencias entre dioptrías positivas y negativas. Pero, ¿a cuál de las dos tipologías responde esta dolencia ocular? Lo cierto es que no podríamos asociarla a ninguna de las dos en concreto sin hacer un diagnóstico previo.
Y es que los casos de astigmatismo tienen una particularidad con respecto a los inconvenientes anteriormente señalados. Una persona con esta característica puede presentar tanto dioptrías negativas como positivas, lo que se denomina como astigmatismo miópico o astigmatismo hipermetrópico respectivamente.
En este sentido, los síntomas son similares a los de la miopía y la hipermetropía, pero no resultan aplicables a la distancia focal, o al menos no de manera exacta, ya que un paciente puede presentar astigmatismo con miopía -con dioptrías negativas- o astigmatismo con hipermetropía, en cuyo caso hablaríamos de una cifra en positivo.
Además de estos valores, cuando hablamos de astigmatismo también hay que tener en cuenta una tercera valoración, que se centra en diagnosticar cuál es el eje de orientación.
¿Se puede operar las dioptrías positivas y negativas en el astigmatismo?
Aunque las tecnologías diseñadas para intervenir sobre esta dolencia han sido más lentas que en el resto de problemas de vista, a día de hoy se puede decir que ya existen métodos para tratar el astigmatismo a través de la cirugía refractiva.
Se trata de una operación en la que se combinan dos tecnologías: por un lado, hablaríamos del láser Excimer y, por otro, del láser de femtosegundo, con los cuales el cirujano ocular puede eliminar el problema en un breve espacio de tiempo y con un postoperatorio relativamente breve y sencillo.