Hay muchos factores que influyen a la hora de tener una mirada bonita: la forma de los ojos, los párpados, las cejas, no tener defectos visuales y, casi tan importante, las pestañas.
Las pestañas nos acompañan desde que nacemos y son capaces de embellecer nuestro ojo con su longitud o grosor. Pero seguro que nunca te habías preocupado mucho de ellas. Por eso, hoy te traemos algunas curiosidades sobre ellas, para que las conozcas mejor 😉
Solo los mamíferos tienen pestañas
¿A que nunca te te habías dado cuenta? Además de proteger los ojos, las pestañas pueden detectar cambios en el ambiente, calor, frío, etc… El animal con las pestañas más largas es el camello. Con una media de 16cm.
Su ciclo es más corto que el del pelo
Las pestañas crecen más rápido que el pelo de la cabeza. Una pestaña se renueva en aproximadamente 90 días. El cabello, cada 6 años.
Están compuestas por keratina y agua
Su composición es casi en su totalidad proteínas, mayormente keratina, como en nuestro cabello. Solo tienen un 3% de agua.
Acumulan multitud de ácaros
Suena mal, pero precisamente es su función. Gracias a las pestañas evitamos que la suciedad se introduzca en nuestros ojos y además, no todos los ácaros son malos. En este caso, nos sirven para eliminar las células muertas y limpiar los folículos.
Se nos cae, aproximadamente, una al día
Su ciclo es de 90 días, pero no van todas a la vez. Al día se pierden entre una y cinco pestañas que son rápidamente reemplazadas.
Todas son diferentes
La longitud y forma de cada una es diferente. Puede haber casualidades de tener alguna igual, pero normalmente su longitud, forma y grosor difieren. Además en el parpado superior tenemos más que en el inferior (150-220 frente a 70-80) y en el superior, su tamaño siempre es mayor.
El récord guiness de longitud son 6,9 cm
La media de longitud de las pestañas suele ser de 1 cm, pero el mayor registro documentado es el de un hombre con casi 7 cm. de longitud en ellas.
Equipo del IOTT